Si tan solo conociésemos las historia (o una parte) de las personas con las que nos relacionamos, todo sería muy diferente: Comprensión, Aceptación, Empatía, Falta de Juicio, Apoyo, Ayuda, Amor.

Si tan solo pudiésemos llegar a entender que todos tenemos los mismos retos que superar, problemas que resolver y soñamos los mismos sueños de Amor, Libertad y Felicidad.

Si tan solo nos tomásemos un tiempo para regalárselo al otro en forma de escucha atenta y comprensiva.

Si tan solo alguien hace lo mismo con nosotros.

La Vida está compuesta de todas las Historias de Vida de cada uno de los individuos.

Nuestra historia nos puede hundir en el más profundo abismo o catapultar hacia nuestro más alto potencial humano y estado de superación personal.

La historia de tu vecino, amigo, hijo, jefe, tendero, taxista, peluquero … exactamente igual.

Todos llegamos, transitamos esta vida; recordamos o no, aprendemos o no, compartimos o no, amamos y/o tememos y luego nos vamos, dejando atrás nuestra Historia de Vida, en las mentes y los corazones de aquellas personas con las que hemos coincidido.

Historias, sin más pero también sin nada menos: ejemplos al fin y al cabo.

Nunca subestimes el poder que tu historia de vida puede ejercer en la vida de otros.

Pero, amig@, tampoco subestimes el potencial que tienen las Historias de Vida de los demás sobre la de la tuya .

Porque somos Uno, aunque hoy aún no lo recordemos.

Ana Vidal